La curiosidad me ha llevado a estos líquidos y con ellos una
sorpresa. Tienen mucho de atrevimiento, de desparpajo, no porque su autor haya
buscado sabores nuevos, no por novedosas sus propuestas, si no por una cierta
agresividad talentosa, que apunto ha estado de poner en el mercado algo
excepcional. Creo que el ímpetu le ha privado del éxito rotundo.
No sé si hablar de “underground” en este caso es excesivo,
pero es lo primero que se me ha venido a la cabeza, si esta palabra define lo
alternativo, lo realizado al margen de la moda, lo que chirria… pues bien esta
hablar de unos líquidos underground. Lo primero que hice cuando me llegaron,
como con todos fue olerlos, en ese mismo momento ya me di cuenta que estaba
ante unos jugos potentes y en un principio no parecía que fueran a tener el
suficiente interés o calidad, para estar hoy escribiendo de ellos, pero si hay
motivos para hacerlo.
Lo primero es el atrevimiento de su creador haciendo esta
propuesta. Sobre unos sabores o bases reconocibles y aceptadas por la inmensa
mayoría de vapers, el intenta ir un poco más lejos, dando potencia a fórmulas
muy manidas de donde ya poco se puede exprimir. Lo consigue y lo hace
sorprendiendo.
Otra de las cosas por las que se merecen este artículo, es
porque son españoles, porque sin llegar a ser jugos excelentes, si son
suficientemente interesantes, sobre todo muy asequibles, lo que nos permite sin
mucho dolor acercarnos a probar y formarnos nuestra propia opinión sobre ellos.
Como decía al principio, con un poquito más de reflexión y
de tiempo, ya que el talento no le cuestiono, ahora estaríamos hablando de unos
magníficos líquidos. Ahora bien, si no es esto lo que se buscaba, si no el
despertar de paladares acomodados y la sorpresa, pues enhorabuena porque el
ejercicio ha resultado exitoso. Al menos para mí tiene mucho mérito.
Vayamos con las descripciones. Como digo siempre, huyo de
las comparaciones (he oído algunas, con las que no estoy lo más mínimo de
acuerdo), por lo tanto me ajustare estrictamente a lo que mi percepción me
dice, de los tres jugos que he vapeado de Alchemist Juice.
Black Label Reserva
Es el que más me ha gustado de los probados, sobretodo
porque siendo su base el chocolate, no amarga, no tiene ese típico sabor a
quemado, de la mayoría de los líquidos que utilizan este aroma como base,
caramelo, nata, vainilla y un ligero matiz picante, no he encontrado ninguna
nota alcohólica. Lo probé nada más recibirlo y no me gustó nada, a la semana lo
encontré rico, muy sabroso, potente y me gusta, está bastante bueno. Me da la
impresión que venía justo en su tiempo de maceración, le suprimiría su apellido
“Reserva”.
Angelus
Muy sabroso, dulce, cremoso. Este probablemente es el que
menos sorprende, el lychee es la base de este jugo que le aporta dulzor y
frescura, una crema avainillada que lo redondea y le da sedosidad. No soy de
líquidos frutales, pero esta es una fruta que me gusta por lo que no me cuesta
vapearlo, esta justito de dulzor y resulta agradable, dice el autor en la web
que entre sus componentes está el brandy, yo sinceramente no lo encuentro por
ningún sitio.
Mamada
Estoy casi seguro que detrás de este líquido hay una
anécdota divertida o al menos interesante, no lo digo solo por su nombre, sino
porque es el más agresivo de todos, pensé en un principio que no sería capaz de
vapearlo, muy sabroso, muy fuerte. Pero cuando el paladar se va acomodando
hasta resulta agradable. Para mi es una fresa con nata acida, la acidez es lo
que llama la atención y en un principio te echa para atrás. Pero claro, si le
privas de esa acidez se queda en un insulso jugo de fresa con nata, con yogurt,
uno más de entre todos. Pues señor@s, si quieren algo distinto aquí tienen una
interesante propuesta para su paladar.
Si os ha despertado el interés este artículo, os recomiendo
que probéis estos líquidos, al menos tendréis asegurada una experiencia distinta
que no os dejara indiferentes.
Disfrutad de un rico vapeo.
