No soy una persona especialmente golosa, pero si tengo
algunas debilidades, entre ellas el chocolate y los dulces de limón, sobre todo
tartas y pasteles. En los cuatro años que llevo vapeando, he probado muchísimos
líquidos y he buscado sin demasiado éxito algún chocolate rico o algún postre
de limón.
“Lemon Bar” de Due Time
Este jugo es una masa de las cocidas en horno, hojaldre o
mejor dicho masa de petit choux, con una suave crema aromatizada con limón, un
toquecito de vainilla y un ligero dulzor seco, probablemente de un azúcar en
polvo. En boca es muy suave, sutil en su conjunto, como sutil también es su
aroma a limón, diría que el limón es una anécdota insuficiente como para dar
nombre a este jugo.
Indudablemente es un líquido de calidad, su vapeo es muy
rico, suave y delicado, pero para mí le falta un poquito de intensidad y el
carácter que da esta fruta a cualquier receta, donde asuma cierto protagonismo
MR. MERINGUE
Aquí el limón si es el gran protagonista. Además este jugo a
parte de sus condiciones pasteleras y dulzonas, nos deja de forma clara la
acidez del cítrico. Es un producto notable, una receta de pastelería fina,
complejo y seductor.
Crema de limón, bizcocho, merengue italiano y mucho
virtuosismo. Lo de merengue italiano lo pongo yo, porque en su descripción el
fabricante habla de merengue, aunque para mí esto no tiene mucha importancia,
lo que sí la tiene es su cremosidad, de ahí que mi apreciación sea la de ese
tipo tan determinado de merengue.
Es un líquido muy potente y con mucho aroma, para mi después
de cuatro o cinco vaporadas exquisitas, me empieza a empalagar y se me antoja
cargante, demasiado potente.
Estos son dos buenos líquidos, distintos e intuí que sin duda podían formar una buena
pareja. Por lo que no dude en mezclarlos, 50% de cada uno, unos golpes de
muñeca y al tanque.
Lemon Bar & MR. Meringue
Pues aquí está el líquido de limón que andaba buscando, un
postre exquisito que vapeo con gula. El primero contiene los excesos del
segundo, aporta elegancia y facilita un vapeo que llega a ser absolutamente
lúdico. El segundo pone todo el carácter del limón sin restar cremosidad ni
dulzura.
Esta vez mi intuición no ha fallado, he conseguido un
líquido de 20 puntos, partiendo de dos, de los que ninguno de ellos llegaba a
los 10, esto si es sumar.
AVISO. Por experiencia advierto que estas mezclas no siempre
salen bien, pero como en cocina, si la materia prima es buena, la intuición
juega de vuestra parte y tenéis algunos líquidos carentes de ese punto que a
vuestro paladar se le antoja, pues un poquito de osadía en el juego puede daros
alguna gran satisfacción.
Mis mas sinceros deseo de que disfrutéis de un rico vapeo.